Tras 30 años prófugo, el mafioso más buscado de Italia, Matteo Messina Denaro, fue detenido por las autoridades de ese país en una importante operación.

Conocido por ser un padrino sanguinario, Messina fue detenido en un centro médico al que había acudido para recibir un tratamiento de cáncer de colon.

Las autoridades detectaron que desde hace un año utilizaba un nombre falso para recibir el medicamento.

El sujeto es considerado como el cabecilla del grupo la Cosa Nostra y en los años noventa se fugó de la prisión tras ser condenado a cadena perpetua.

La primera ministra Giorgia Meloni consideró que esta captura es una gran victoria del Estado en su guerra contra el crimen organizado.