A dos años de la muerte de Kobe Bryant y su hija Gianna, de 13 años, la viuda del astro de la NBA, Vanessa Bryant, arremetió contra las autoridades de Los Ángeles por difundir imágenes de los cadáveres de sus seres queridos.

Bryan asegura que no ha tenido el valor de ver las imágenes por el dolor que le generaría y por que quiere recordarlos como fueron en vida.

«Me siento devastada, herida y traicionada por los empleados del condado que filtraron las fotos», sentenció ante un tribunal del Condado de Los Ángeles.

La mujer dice que desde que se enteró de la existencia de estas fotos ha tenido varios episodios de crisis de ansiedad y pánico.

Fue a través de medios de comunicación, cuando estaba junto a su hija April, de 7 meses de edad, que Vanessa se enteró de lo que habían hecho los agentes del condado de Los Ángeles.

“Salí corriendo de la casa y corrí hacia un lado de la casa para que las niñas no pudieran verme. Quería correr… calle abajo y gritar. No puedo escapar de mi cuerpo. No puedo escapar de lo que siento», declaró Bryant.

Bryant presentó una demanda civil federal alegando que el condado de Los Ángeles invadió su privacidad e infligió angustia emocional al no contener adecuadamente la difusión de las fotografías.

Las investigaciones señalan que el personal policial mostró imágenes gráficas de la escena mientras estaba en un bar, otro agente compartió las fotos mientras jugaba un videojuego, y un tercero envió docenas de fotos a alguien que no conocía.